Es interesante ver los cambios positivos que hacemos, como ver también como esos cambios modifican nuestro entorno y realidad, el darnos cuenta y reflexionar sobre nuestras actitudes es muy importante. Mirarnos, observarnos ... detenernos en el efecto que produce una reacción inesperada que en realidad era de esperar ... centrarnos sólo en lo que hacemos dejando al otro su responsabilidad de lo propio sin criticar, sin juzgar, nos pone en un lugar de crecimiento y madurez necesario para seguir avanzando con claridad y tranquilidad. Estar a solas nos permite encontrarnos con un valioso silencio que nos lleva a conectarnos con lo que somos, nos lleva a preguntas que siempre tienen respuestas porque cada uno en lo más íntimo de su ser guarda su historia de tristeza, dolor, abandono, indiferencia, soledad, injusticia bajo llave, teniendo siempre la oportunidad de usarla para sacar a la luz todas las emociones ... los recuerdos, las marcas que dejan situaciones no resueltas y que se deben sanar para tener la vida que realmente merecemos ! Si bien lo vivido es parte de un pasado que no es bueno traer siempre a nuestro presente porque el aquí y ahora es lo que vale, sanar debe ser una prioridad.
La misericordia nace por entender la miseria humana, sus errores, la incapacidad de muchos para sobreponerse a lo que le toca vivir y superarlo, la misericordia te lleva a entender cuál fue el motivo por el cual una persona dañó a otra, una vez que se entiende, se comprende ... el perdón es posible.
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