Siempre se repite lo mismo, cada año ... errores que separan en lugar de incluir, de integrar !

Poner todo en la misma bolsa es un dicho de muchos años y tiene que ver con incluir a todos y cuando digo a todos no hay rótulos para separar a los masculinos de los femeninos, se entiende ?

.....hablar de una situación generalizando .... de una reacción, de una manifestación, de un corte de calle sin pensar en los demás, señalar y juzgar a todos los motociclistas por igual diciendo son todos delincuentes no es correcto. Como tampoco festejar y difundir el día del estudiante sólo para los jóvenes, como si no existieran diferentes edades ... Todos en la misma bolsa incluye también al día de los enamorados en donde año tras año y habiendo casamiento igualitario sólo se ven fotos, afiches y publicidades de una mujer y un hombre ... y el resto de las parejas ... ? pronóstico del tiempo solo para automovilistas jamás incluyen a las motos, mujeres blancas delgadas, jóvenes el resto no existe ?estos ejemplos y muchos más tienen que ver con que la gran mayoría muestra una parte, se maneja y vive de acuerdo a un grupo, decide por los demás dejando afuera como por decreto, excluidos al resto porque no pertenecen a la interesante mayoría en cualquier orden, mayoría muchas veces ignorante que no mide consecuencias, fanáticos peligrosos, mayoría que discrimina siendo parte de la intolerancia, de la falta de respeto. Es lamentable y triste que los medios de comunicación tengan total responsabilidad en esto de la no inclusión, hablar para un sector y no para todos. De todas maneras ... en miles de seres la hipocresía, el miedo al rechazo, continúa en el mundo entero, por la gran falta de autoestima, permitiendo que siga existiendo  la marcada separación,, en donde los soberbios, machistas, mujeres y hombres  fuera de lugar con ausencia de conciencia sigan en la misma posición la de los extremos. La única manera de vivir como merecemos es dándonos el lugar que nos corresponde de manera que la responsabilidad está en cada uno, no callando, no ocultando, hablando desde la serenidad que da la sabiduría mostrándole al otro su error, su equivocación.